Reynaldo Yucra, es un estudiante orureño de 23 años de edad que quedó a cargo de sus dos hermanas menores debido a que sus padres, ambos médicos, fallecieron por coronavirus el pasado 17 de enero y con su muerte los 3 se quedaron con la deuda de 265.000 bolivianos a la clínica que atendió a sus progenitores.
Reynaldo comentó en una entrevista con medios orureños, que su padre trabajaba como médico en el Centro de Salud Yugoslavo y su madre como enfermera. Ambos enfermaron de la COVID-19 pero una prueba de PCR que dió un falso negativo complicó su salud, pues al creer que no tenia el virus continuaron con sus labores.
El afligido hijo explicó que sus padres permanecieron en terapia intensiva por 11 días y que la cuenta cada 24 horas era muy elevada. “Las recetas eran muy caras, por dia gastaba 5000 bolivianos en medicamentos. Los gastos clínicos se hicieron un total de 265 000 bolivianos que ahora debemos cancelar”, dijo.
“A mis padres no les funcionaba ningún tratamiento, intentamos con todo pero nada resultaba. Llegamos a un punto que el doctor nos dijo que ya no sabia qué más ponerles, solo nos quedaba esperar”, explicó Yucra quien a sus 23 años no percibe ingresos económicos y que quedó a la cabeza de dos hermanas menores.
Reynaldo dijo con un nudo en la garganta: “Pensé que mis papas iban a salir como ingresaron, caminando, pero me entregaron dos cajones.”
El colegio medico y el Sirmes ayudaron a la familia, en la medida de sus posibilidades, pero no se logró reducir la deuda. Yucra dijo que se les comentó acerca del seguro de vida para los médicos, que consta de 100 000 bolivianos por cada medico que fallezca, “hicimos el tramite y los documentos pero no sabemos si nos desembolsaran, no nos dicen nada”, finalizó.
Si desea apoyar a la familia puede realizar un deposito a la cuenta del Banco Nacional de Bolivia (BNB) con número 5500738202 a nombre de Reynaldo Yucra Aguilar con cédula de identidad 7344082 Oruro.
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